23 ene 2025

Bariloche - Esquel en bicicleta

Once años después de haber recorrido Bariloche, Villa La Angostura y San Martín de los Andres en bicicleta, volvimos hacia el punto inicial, pero con la intención de pedalear hacia el sur por la ruta 40, con destino a Esquel, llegando por la ruta 71, que se adentra en el Parque Nacional los Alerces.

Volamos desde Buenos Aires hacia Bariloche, por Aerolíneas Argentinas, con nuestras bicicletas embaladas y retornamos desde el aeropuerto de Esquel.

En el trayecto, recorrimos un total de 335 kilómetros, con 3800 metros de ascensos. Cada tramo detallado debajo contiene su respectivo enlace a la aplicación Wikiloc, e indicación de metros de ascenso y descenso. En algunos tramos, los metros de ascensos y descensos son incorrectos debido a errores de la aplicación al momento de grabar el recorrido. Los ascensos y descensos correctos son los que aparecen en este relato y no en Wikiloc.


Bariloche - Río Viollegas (68 km)

Desnivel positivo: 700 m
Desnivel negativo: 900 m
Enlace Wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-cicloturismo/bariloche-rio-villegas-197342328


Partimos desde la ciudad de Bariloche y tras una durísima subida, comenzamos a pedalear en dirección sur, tomando la ruta 40, hacia Río Villegas, bordeando los lagos Gutiérrez, Mascardi y Guillelmo.




La hermosa ciudad de Bariloche


Hasta poco antes de llegar a Río Villegas, el camino presenta un desnivel ascendiente gradual para luego darnos la bienvenida a nuestro destino con los últimos kilómetros en bajada.



Los primeros kilómetros de pedaleo





Lago Gutiérrez


El trayecto se torna muy amigable y atractivo, porque aparece como un mirador constante, con lagos a los costados y sectores boscosos alucinantes entre lagos.





Lago Guillelmo


Una vez dejado atrás el lago Guillelmo, sobreviene un camino montañoso de preciosas vistas.







A poco de seguir ascendiendo gradualmente, una imponente cuesta nos hará saber que estamos a pocos kiómetros de Río Villegas.




Atravesada dicha cuesta, solo nos quedará pedalear en descenso hasta llegar a Río Villegas.







Río Villegas es un muy lindo y pequeño pueblo, que cuenta con un río epónimo vistoso para caminar, con opciones de alojamiento y restaurantes para pasar agradablemente la noche.






Río Villegas - El Bolsón (56 km)

Desnivel positivo: 703 m
Desnivel negativo: 933 m
Enlace Wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-cicloturismo/rio-villegas-el-bolson-197423089


Dejamos atrás Río Villegas para continuar hacia El Bolsón. En este tramo encontraríamos los primeros picos nevados del recorrido. Pero antes, una salida desgastante con 16 kilómetros de ascenso constante. La buena noticia: una vez concluida esta cuesta,  llegaríamos a El Foyel, donde disfurtaríamos de un espectacular café con tostadas en el parador Tacuifi. No es habitual que paremos a tan poco de haber comenzado el recorrido, pero la subida constante durante 16 km y las bajas temperaturas nos convencieron de hacer una escala. Y lo bien que hicimos.



Parador Tacuifi




Una vez cruzada una segunda cuesta importante, el camino es en bajada hasta llegar a El Bolsón, a excepción de una pequeña cuesta pronunciada algunos kilómetros antes del destino, a la altura de Los Repollos.

En este trayecto, el color azul de los lagos cede su protagonismo al verde de los pinos característicos de la región.











Cinco kilómetros antes de El Bolson, nos detuvimos en el Mallín Ahumado, un parador que se encuentra en el kilómetro 1922 de la ruta 40, para devorar un delicioso sánguche de pastrami.

En El Bolsón, nos quedamos algunos días para visitar Lago Puelo y hacer la caminata hasta El Cajón del Azul.



El Bolsón



Camino hacia El Cajón del Azul



El Cajón del Azul




Lago Puelo


El Bolsón - Lago Epuyén - Epuyen (49 km)

Desnivel positivo: 610 m
Desnivel negativo: 618 m
Enlace Wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-cicloturismo/el-bolson-lago-epuyen-epuyen-197835141


Salimos bien temprano, nuevamente con destino hacia el sur, con el objetivo de llegar hasta Epuyén, haciendo antes una escala en el lago Epuyén.

Este tramo comienza con una cuesta que se sostiene durante unos 5 kilómetros, con una pendiente bastante pronunciada para dejar atrás El Bolsón.




Una vez superada la subida, el camino ofrece una bajada con algunos ascensos más, pero nada dificultosos. Antes de llegar a Epuyén, hay una última cuesta pronunciada.








En este tramo, como se puede observar en las fotos, el verde predomina en el paisaje y abunda la vegetación.






Antes de llegar a Epuyén, nos desviamos de la ruta 40 para hacer una escala en el lago Epuyén, en la zona que tan solo dos días más tarde sería tristemente arrasada por severos incendios.





Epuyén - Cholila (43 km)

Desnivel positivo: 505 m
Desnivel negativo: 250 m
Enlace Wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-cicloturismo/epuyen-cholila-197931966


A esta altura ya se había tornado un clásico encontrarnos con una cuesta al salir de cada pueblo o ciudad, pero esta definitivamente le ganaría a todas las demás. La salida desde Epuyén obliga a pedalear en ascenso y con pendiente muy pronunciada durante 16 kilómetros, siendo los más bravos los primeros 10 kilómetros y luego tornándose más amable.



Bienvenida al Parque Nacional los Alerces


A poco de terminar la mencionada cuesta, dejamos la ruta 40 para tomar la ruta 71 e ingresar en la zona del Parque Nacional Los Alerces.

A partir de allí, transitamos un camino donde las montañas se van alejando, a diferencia de los anteriores.








Ya habiendo pedaleado varios kilómetros por la ruta 71 y siendo la temperatura muy baja -sin intenciones de ascender- y el cielo nublado, decidimos parar en el Museo Bar La Legal, para tomar un café acompañado con alfajores de maicena.






Terminado el cafecito y la escala en La Legal, continuamos pedaleando hacia Cholila, adonde llegaríamos no sin antes atravesar una nueva cuesta.







Cholila - Bahía Rosales (63 km)

Desnivel positivo: 716 m
Desnivel negativo: 526 m
Enlace Wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-cicloturismo/cholila-bahia-rosales-198042293


Si el lector llegó hasta acá, sepa que su paciencia valió la pena. Este tramo es el más precioso de todo el viaje, sin ninguna duda.

Salimos desde Cholila, por la ruta 71, con dirección a Bahía Rosales, ya adentrados en el Parque Nacional los Alerces.

A pocos kilómetros de abandonar Cholila, el asfalto desaparece para dar lugar a un camino de ripio que podríamos dividir en tres etapas de 20 kilómetros cada una.

La primera, desde Cholila hasta el puesto de ingreso al Parque Nacional los Alerces, presenta un ripio aceptable.

La segunda etapa, entre los lagos Rivadavia y Verde, deplorable, con piedras de gran tamaño, arenilla, y subidas y bajadas muy técnicas, en las que hay que prestar muchísima atención, lo cual se torna más difícil con semejante paisaje abrumador a los costados.

Una tercera etapa, donde el ripio retoma un estado más decente, pero lejos de ser óptimo. Además, nos toparemos con una cuesta pronunciadísima y otro sinfín de cuestas también dificultosas.

Fue el tramo más duro del recorrido, pero como dije antes, también el más hermoso. Es imposible contar la cantidad de cuestas que se deben trepar, pero sí puedo decir que por lo menos diez de ellas son muy desafiantes.






Tras una de las primeras cuestas desafiantes, se llega al mirador de Villa Lago Rivadavia, desde donde puede verse dicho pueblo y un pequeño brazo del río Carrillefu, que luego desemboca en el gran lago Rivadavia.



Pedaleando bien cerca del lago Rivadavia


La primera etapa, con ripio en estado aceptable


Las subidas rinden sus frutos y nos regalan vistas maravillosas del lago Rivadavia




La transparencia del agua es tal que se torna invisible


Dejando atrás el lago Rivadavia, comienza la etapa más difícil del recorrido, hasta llegar al lago Verde. Una vez allí, la ruta 71 vuelve a convertirse en un derrotero de paisajes que compiten en altísimos niveles de belleza.



Lago Verde


Subidas, subidas, y más subidas




La llegada al cartel que indica el comienzo del sendero que lleva al mirador del lago Verde significa una buena noticia: la cuesta más desafiante del recorrido ha quedado atrás. Se trata de un caracol en ascenso que acompaña a una curva en la ruta y termina en un segmento sumamente pedregoso.

Tras otra cuesta dificultosa pero no tanto como la anterior, comienza a vislumbrarse el imponente lago Futalaufquen.










El último tramo previo a Bahía Rosales es sencillamente espectacular, porque la ruta bordea el lago Futalaufquen, permitiendo mútiples perspectivas.












Llegó finalmente el ansiado arribo a Bahía Rosales, donde pasaríamos tres días descansando, disfrutando del lago y haciendo algunas caminatas cortas.



Bahía Rosales


Quebrada del León




Lago Futalaufquen




Bahia Rosales - Esquel (56 km)

Desnivel positivo: 699 m
Desnivel negativo: 645 m
Enlace Wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-cicloturismo/bahia-rosales-esquel-198434585


Llegamos así al último tramo de nuestro viaje. A poco de dejar atrás Bahía Rosales, ya por camino de asfalto, tomamos la ruta 71 y luego, el desvío que nos lleva hacia Esquel. Más adelante, este desvío confluye con la ruta 259. Esta ruta es muy angosta y peligrosa. Afortunadamente, cuenta con una banquita de piedra, y a pocos kilómetros de Esquel, con una bicisenda sobre la vereda, del lado izquierdo. Recomiendo evitar transitar por la ruta porque el tránsito lo torna imposible y altamente peligroso.

El último trayecto fue tan genial como los anteriores. Los paisajes no se hicieron esperar y apenas salimos desde Bahía Rosales, nos encontramos nuevamente pedaleando bien cerca del lago Futalaufquen.







Dejando atrás el lago Futalaufquen, todavía sobre la ruta 71, el verde vuelve a predominar, el paisaje cambia drásticamente y nos ofrece una belleza diferente.






Laguna Terraplén


Tras tomar el desvío que nos lleva a Esquel y nos hace abandonar la ruta 71 para pasar a la 72, solo queda pedalear un poco más en subida para después disfrutar de lo que fue la mejor bajada de todo el viaje.




Alcanzado el Mirador del Valle, el camino nos regala un descenso abrupto de 200 metros en tan solo 4 kilómetros, para relajar las piernas y sentir el tan ansiado viento feroz en la cara que todo ciclista sabe cuánto placer genera.

El paisaje a través de la bajada, que es el camino que se puede ver desde el Mirador del Valle, es verdaderamente conmovedor. Tal es así, que no fue fotografiado para no interrumpir el goce del descenso brutal.




Así llegamos a Esquel para degustar una exquisita pizza con cerveza en El Regufio y brindar por haber finalizado un viaje más en bicicleta, que quedará en el recuerdo y se volverá a vivir mentalmente una y otra vez. 

Este fue un viaje muy especial, ya que desde el año 2019 que no hacíamos un viaje juntos con Maxi y su regreso me permitió confirmar que la felicidad, siempre es mejor si se comparte.

Por cualquier tipo de consulta o comentario, pueden escribirme a leonelciliberto@gmail.com, ya que blogspot ya no envía notificaciones ante la publicación de comentarios.

Gracias por su tiempo y por su lectura.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Grande Leo que hermosa nuestra patria, hermosas fotos muy bueno tu relato